Chiloé tiene una cocina muy importante, más aun cuando se mantienen las tradiciones del arte culinario. La papa cumple un rol fundamental, ya que es el cultivo más común y amplio del archipiélago.
Difícil es encontrar un plato chilote que en su preparación no contenga papas. El cultivo de la papa, es importante en la economía campesina de Chiloé, ha permitido crear una cultura basada en el trabajo y en la reciprocidad comunitaria que se expresa en el cotidiano de los isleños. Ha sido el cultivo por excelencia de este archipiélago por mucho tiempo, incluso desde la llegada de los españoles.
Este alimento es productor de calor y energía. Las papas chilotas agregan a estas cualidades sabor y colores que hacen que los platos tomen formas y colores muy atractivos al ojo del consumidor.
La papa ha sido consumida de las más diversas formas. Desde enterradas en el rescoldo del fogón, hasta los sofisticados milcaos o mellas que requieren de un especial procesamiento. La papa se ha consumido de manera natural, ahumada (llange), alterada por humedad o el agua (pilcahue, vuña) o en subproductos como el chuño y el guachacay, un rústico aguardiente.En cada una de estas situaciones se selecciona ciertas variedades. Por ejemplo, para hacer milcao se prefiere papas grandes; para el horno (o rescoldo), papas blandas y harinosas; para la cazuela, blandas y sabrosas. La papa produce panes y es complemento a comidas. Ha reemplazado al pan de trigo porque éstos nunca se produjeron en abundancia.
Difícil es encontrar un plato chilote que en su preparación no contenga papas. El cultivo de la papa, es importante en la economía campesina de Chiloé, ha permitido crear una cultura basada en el trabajo y en la reciprocidad comunitaria que se expresa en el cotidiano de los isleños. Ha sido el cultivo por excelencia de este archipiélago por mucho tiempo, incluso desde la llegada de los españoles.
Este alimento es productor de calor y energía. Las papas chilotas agregan a estas cualidades sabor y colores que hacen que los platos tomen formas y colores muy atractivos al ojo del consumidor.
La papa ha sido consumida de las más diversas formas. Desde enterradas en el rescoldo del fogón, hasta los sofisticados milcaos o mellas que requieren de un especial procesamiento. La papa se ha consumido de manera natural, ahumada (llange), alterada por humedad o el agua (pilcahue, vuña) o en subproductos como el chuño y el guachacay, un rústico aguardiente.En cada una de estas situaciones se selecciona ciertas variedades. Por ejemplo, para hacer milcao se prefiere papas grandes; para el horno (o rescoldo), papas blandas y harinosas; para la cazuela, blandas y sabrosas. La papa produce panes y es complemento a comidas. Ha reemplazado al pan de trigo porque éstos nunca se produjeron en abundancia.